miércoles, 29 de diciembre de 2021

DESPEDIR EL AÑO

 



Cómo despido al año 2021
La razón de la sin razón, que a mí razón se hace

El comienzo de la tregua de los 365 días que parió tu año 2021.
Tantas partidas de felicidad, tantos momentos ante la duda. Y un principio con el destino, quererte ante la adversidad.
Las campanadas de todos los templos de cualquier religión en el mundo, en cualquier estado, verde y desierto, hasta helado, en las cumbres con los techos del mundo.
Montañas sin miedo
Precipicios ante el equilibrio
La fe con el destino.
Cómo vestirme de nuevo, para despedir y recibir el nuevo año.
La angustia del que ahora es pasado. De los momentos tan tristes, para el ser humano. Cómo borrar tanta pérdida en los sentimientos que nunca mueren. La huella del pasado, que, en rojo y negro, con las explosiones de tu lava, rompiste al volcán. Año de tu antojo, para sentirse y no valer nada. Ante tu fuerza, la raíz viva, la que mueve el mundo. La dueña, con el principio del universo, el que conocemos en nuestra vida.
Por un deseo, por cualquier momento que sea mejor, que el pasado.
Que la vida brille para el nuevo año y dejar de lado todo lo malo.
Que sea diferente, que el amor rompa las rocas que tan difícilmente desaparecen. Y como un milagro, que vuelva la paz al mundo.
Para el 2022, que se haga la gloria de Tú reino.

lunes, 27 de diciembre de 2021

NAVIDAD ISLEÑA

 


 guitarra y los tambores. En un sueño de la noche, que se presenta con la Navidad.

Los paisajes de tus islas, el tremendo mar, las olas que no se cansan de bailar, en tu orilla, al compás de los vientos de los alisios con las brumas de las cumbres, para sentir tu invierno fresco y natural, cómo el mundo que te dejó navegar.
El brillo de tus cielos, todas las constelaciones vestidas con la imagen divina. Sentirte aborigen en un mundo nuevo. Mirar al más allá, del cielo y con un pensamiento único, libre de tempestad ante cualquier vulgaridad. Las campanas del universo con su tronar del miedo, verte temblar con todos los sentimientos a flor de piel, que pide querer y amarte como nunca en el sueño, con la Navidad.
Hoy que todos queremos, reunirnos, con la felicidad, ríe, canta y llora, con el antojo de quién puede más. La gloria de tu espíritu que no tiene final y Dios en el camino para siempre.